Por la igualdad de género.

¿Es lo mismo que un hombre muestre sus pechos a que lo haga una mujer? Generalmente la respuesta que obtengo mantiene este argumento: No, porque un hombre es un hombre, y no es lo mismo que una mujer. Bien, pues en esta extraña y peculiar sociedad en la que vivo, tienen sexualizados los pechos de estas sin ser capaces de entender que es carne y piel al igual que el hombre. Existen muchas culturas diferente en el mundo, en la mía sucede esto, sin embargo en Chad, está bien visto que con una cuchilla se les practique una incisión sobre el vientre hasta formar un dibujo, después, le arrojan ceniza en la cicatriz para aumentar el relieve. Y mi pregunta es, ¿Por qué en este caso vuelve a ser la mujer la victima? En cambio, en Níger los jóvenes se maquillan profusamente para participar en una especie de concurso de belleza llamado geerewol. Los jóvenes bailan alineados frente al jurado, formado por las mujeres.
Otra desigualdad social podría ser esta: ¿Se ve de igual forma una mujer sin depilar que a un hombre? La respuesta que obtuve en este caso fue la siguiente: No, porque un hombre no tiene porque depilarse al ser hombre, la mujer si, si no lo hace es una guarra, porque así huele más. ¿A los hombres no le huele el sudor? A lo largo de la historia ni mujeres ni hombres veían la necesidad de depilarse, hasta mayo de 1915 donde apareció un anuncio gráfico en la revista Harper´s Bazzaar en el cual decía "La moda para el verano y el baile moderno se combinan para hacer necesaria la eliminación del molesto vello", a esto se le sumo el auge en la moda de las "Chicas pin-up" tras la Segunda Guerra Mundial. Y ahora bien ¿Era necesario que esta moda fuera exclusiva para mujeres? No quiero decir con esto que no haya que depilarse, sino que al igual que en la actualidad hay hombres que se depilen y hombres que no, también existen mujeres que por libertad de decisión eligen depilarse o no. Y si algunas de estas no se quieren depilar no han de ser señaladas o criticadas.
¿Entendéis bien el concepto de igualdad de género? Este concepto es necesario que todo el mundo lo comprenda bien, ya que es clave en la Declaración Universal de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas. La igualdad de género exige los mismos beneficios, mismas sentencias, mismo respeto y ninguna violencia entre hombres y mujeres, y esto es igualdad legal, cultural y social. Es el punto justo y equilibrado entre los dos extremos serían el machismo y el hembrismo. Para quien no entienda bien estos dos términos, el machismo es la actitud de prepotencia de los varones respecto a las mujer, definido así en la Real Academia Española, sin embargo el hembrismo es un neologismo usado para el desprecio a los hombres.
Hoy en día existen graves casos de desigualdad de género en sociedad, por ejemplo, una mujer pobre sufre una doble discriminación a causa de su genero y de su nulo poder adquisitivo, además existen grandes diferencias en la educación entre hombres y mujeres. Vacíos legales respecto a la protección o insuficiencia para acceder a los servicios básicos, desigualdad en el entorno laboral evidente en brechas salariales, tipo de trabajo y condiciones, por ejemplo, pocas mujeres ocupan puestos directivos, y existe una representación mínima en política. Por si fuera poco, la información en medios de comunicación deshumaniza a la mujer cuando hablan de casos sobre violencia de género, pocas veces da voz a mujeres que representen un modelo a seguir. Además existe poca presencia de mujeres deportistas. También las guerras causan una profunda herida en la sociedad y dejan a las mujeres y a las niñas en situaciones muy vulnerables. Violaciones y agresiones son utilizadas como tácticas de guerra. Esto lo vemos como algo lejano e irrelevante, sin alguna importancia. Sin embargo para lxs ciegxs que no sean capaces de ver esta situación sepan ustedes que la desigualdad de género existe gravemente también en España. Por ejemplo, las mujeres cobran un 22% menos que los hombres en su salario medio anual. El 97% de las personas ocupadas a tiempo parcial por hacerse cargo del cuidado de los hijos menores de catorce años son mujeres. Que el 7% de hombres dejan de trabajar tras el nacimiento del hijo mientras que el 38% son mujeres. Además una pensionista recibe al mes una media de 597´21€ mientras que la pensión media de un varón es de 971´92€. Estos son algunos ejemplos de todo lo que pasa en nuestro país, y que nosotros vemos con toda normalidad. Sin embargo esto que vemos con tanta naturalidad deriva a los micromachismos. Pocas mujeres entienden el significado de esta palabra, y muchas son las que creen que solo es importante cuando comienza la violencia. Esto no es así, los micromachismos son una práctica de violencia en la vida cotidiana que sería tan sutil que pasaría desapercibida pero que reflejaría y perpetuaría las actividades machistas y la desigualdad de las mujeres respecto a los hombres. Se han podido clasificar cuatro tipos de micromachismos: Los utilitarios, donde destacan las supuestas "capacidades femeninas" de servicio y la naturalización de su trabajo como cuidadora. Los encubiertos, son sutiles y silenciosos, y aparecen en los paternalismos, en el "ninguneo" y en el mal humor manipulativo. Los de crisis, que surgen cuando ellas empiezan a romper la balanza de la desigualdad. Y finalmente, los coercitivos, donde se usa la fuerza moral psíquica y económica para limitar la libertad de la mujer y restringir su capacidad de decisión.
Es triste saber que en un estudio realizado por el Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud en 2015 muestra que más del 80% de los adolescentes entre catorce y diecinueve años conocen alguna situación de violencia de genero en parejas de su entorno y nueve de cada diez manifiesta haber ejercido violencia psicológica sobre su pareja.
Esto debe de acabar, ya que detalles tan mínimos son los que nos avisan del infierno que puede llegar después. Así pues, voy a escribir varias preguntas que debe una chica hacerse para detectar que una relación es peligrosa:

• ¿Necesita saber que haces todo el tiempo y te exige fotos para saber que es verdad?
• ¿Conoce la contraseña de tu móvil y registra tus conversaciones?
• ¿Se molesta porque quieres pasar tiempo con tus amigxs?
• ¿Vigila tu conexión en redes sociales? ¿Y a altas horas de la madrugada?
• ¿Te exige que actualices tu estado para poner que tienes una bonita relación?
• ¿Te critica la ropa cuando no le gusta y ofrece quejas de que muestras demasiado?
• ¿Aceptas tener algún tipo de relación sexual con él aunque no te apetezca?

Todo esto se encuentra camuflado en el sector romántico de la sociedad, "y si no lo haces, no me quieres".  Además no aportan mucho las novelas, cuentos y películas donde repiten el estereotipo de "chica-torpe-desvalida" y "chico fuerte-agresivo-celoso-protector" como ofrecen por ejemplo en Crepúsculo, 50 Sombras de Grey y cuentos infantiles adaptados por Walt Disney. 

Finalmente todo esto deriva a violencia sexista, la cual puede ser violencia domestica, ejercida en el terreno de la convivencia familiar, por parte de uno de los miembros contra otros. Violencia de género, física o psicológica ejercida contra cualquier persona sobre la base de su sexo, según la ONU-mujeres lo define como "a aquella dirigida contra una persona en razón del género que él o ella tiene así como de las expectativas sobre el rol que él o ella deba cumplir en una sociedad o cultura". Violencia contra el varón y violencia contra la mujer. 

Sin embargo, no todas las mujeres son victimas ya que existen ciertas a las que tomar como ejemplo. Algunas mujeres en la historia conducieron al éxito sus países mientras eran señaladas, como pudo ser Cleopatra (69 a.C-30a.C) señora del trono egipcio con dieciocho años, enfrentándose la grandísimo Imperio Romano. Juana de Arco (1412-1431) con diecisiete años convenció al rey Carlos VII para echar los ingleses de Francia. Lideró la revuelta contra la ocupación en la Guerra de los cien años y ganó batallas como la de Orleans. Indira Gandhi (1966) fue elegida primera ministra en la India y Clara Campoamor (1933) consiguió en España el derecho a voto de la mujer, entre otras muchas mujeres.

Tras todo esto querría concluir que una vez teniendo el primer paso que es ver el problema y aceptarlo el segundo a de ser ayudarnos entre todos, tanto chicas y chicos, y erradicarlo.