domingo, 3 de enero de 2016

Lady Drama III

Lady Drama está loca, Lady Drama está desquiciada. A Sir Relax ha echado de su vida, a Sir Relax echó de su casa. Pues Sir Relax le mentía a escondidas, Sir Relax nueva amante tenía. Miss Dudas le decían, Miss Dudas le llamaban. Era fea, era gorda, era mala. Pero ella le seducía y Sir Relax con ella huia. Lady Drama le gritaba, histérica le llamaba. «¿¡Tan poco por mi sentías que te vas con la primera dama!?», Sir Relax ya no sabía que hacía, pronto calvo de estrés se quedaba. Realmente la quería, pero como a una fiera era imposible domarla.
De pronto, Lady Drama mansamente a él se arrimaba, y cuando menos lo esperaba, como tal víbora su veneno le clavaba. Con sangre fría, Lady Drama le observaba, a sangre fría a Sir Relax mataba. Con poca fuerza Sir Relax se levantaba, con poca fuerza, con Miss Dudas escapaba. Lady Drama fuerte le agarraba «¿No ves que aun te quiero? ¿Por qué te marchas?» Sir Relax le respondía «Porque haces daño, porque eres mala» Lady Drama con aun más fuerza lloraba.
Pasaban los días, menos se respondían, cada vez menos se hablaban. La casa se les caía, Sir Relax comenzó por la ventana, Lady Drama fue directa a por el techo, solo la planta baja, la base que sostenía al resto les quedaba. Ambos con ganas de huir, ambos con ganas de quedarse y reconstruir. Miss Dudas aún permanecía, y poco a poco a Lady Drama también seducía. Miss Dudas se arrimaba a ella, y Lady Drama contemplaba perpleja tales curvas de aquella dama. Cada vez más a ella se arrimaba. Pero no podía escapar con ella, a Sir Relax aún amaba. Sabía que juntos tenían que enviar a Miss Dudas a la playa, pues con ella dentro, aumentaban los dramas. Sir Relax a veces se confundía, y dramático también se volvía, ¿pero que hacía? Así al garete todo se iría.
Lady Drama tomó riendas, tomó cuchillo y valentía, a Miss Dudas se dirigía, y aunque curiosidad por ella sentía, aun así la mataría. Era difícil, Sir Relax a la otra furcia defendía. No entendía que ahora Lady Drama es cuando más lo necesitaría.
Lady Drama bajó el cuchillo, mirando a los ojos a su chico. «¿Por qué me haces esto?» con tenue voz preguntaba. «Porque cada vez que me dices algo, me entran ganas de alejarme de ti y no volverte a ver. Porque he cometido un error una vez, estoy arrepentido, pero tu perdón no he recibido, y solo más daño has causado». Y asi, Sir Relax mil cosas horribles le decía, y no paraba, no podía, el odio por dentro le comía. Asi pues Lady Drama agachaba la cabeza, oscuro era el color de todo. El suyo miedo lloraba por su ausencia, llamando a su cuerpo con mil señas, Lady Drama al fin dijo «Mas, ¿que se le ofrece a un cuerpo que rechaza una vida como ofrenda?». Tras ello, Sir Relax comenzó a disparar cohetes, estaba cansado de tanto dramatismo.
«Quedate tu vida, y busca un ser divino que te complazca a tu manera». Tras ello, Lady Drama de nuevo enfurecía y dramáticamente ella volvía «No necesito un ser divino, solo pido que sea fiel, que con Miss Dudas no me vuelva a engañar, y no le vuelva a perder». «Mi cariño es todo tuyo» Sir Relax le respondía, «tu sacaste el látigo y metiste las manos entera en las yagas. Mis heridas ya han sangrado demasiado». Después de tales palabras, para finalizar tal dramática escena, Lady Drama ante él se arrodillaba, su orgullo se esfumaba, y con un fino hilo de voz le respondía «prometo curarlas con mi propia saliva». Así, Sir Relax se calmaba. Fue curioso, como Lady Drama sola se controlaba, ya que por amor todo lo daba. Ahora Sir Relax junto a ella se quedaba, él sabía que era cuando más le necesitaba. Juntos intentarían volver a levantar las ruinas de la casa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario