Soy la bruja hechizada por el sapo.

Soy la bruja hechizada por el sapo. Pequeño engendro vizcoso y asqueroso que abrió mi pecho y se comió a bocados mi corazón. Su lengua dejó solo veneno en mis entrañas. Tan solo en mi principe le quise convertir, y gracias a él ahora soy una bruja malvada. Cosí la mía herida con la poca fuerza que me quedaba, con el hilo que marcaba la vida de otros. Al cortar de la bovina al coser, unos cuantos mataba. Pero no pasa nada, si así me veré mejor. Ahora solo daño a princesas enamoradas. Cuanto más principes a mi alrededor más magia obtengo, más bella luzco, no envejezco. Mientras ese horrible sapo empachado de mi ser, canta feliz en su charca, rodeado de ranas que no le darían ni la mitad de amor que podría darle yo. Solo deseaba una bonita historia de amor y todo falló. Como un torbellino destruyo las casas de otros. Me aprovecho de hombres y mujeres a base de lujuria. El dolor mantiene firme los nudos del hilo que cose mi herida aun por cicatrizar. El odio mantiene vivo este cuerpo sin corazón.